La caída de pelo por falta de hierro o alopecia ferropénica es la pérdida del cabello que se produce cuando una persona tiene una deficiencia de este mineral.
Aunque está relacionada con la anemia, la caída de pelo por falta de hierro puede aparecer antes de que se desarrolle la enfermedad; resultando una gran señal de alarma para corregir este problema de salud antes de que alcance una mayor gravedad.
La rapidez es fundamental en estos casos por dos motivos: por un lado, ha de evitarse que la ferropenia (déficit de hierro) progrese a una anemia y, por el otro, actuar rápidamente también sirve para que la caída del pelo por falta de hierro no desencadene otros tipos de pérdida capilar como el efluvio telógeno crónico, la alopecia areata o la androgenética.
En este artículo te explicamos por qué un déficit hierro afecta a tu salud capilar, cómo reconocer una caída de pelo por falta de hierro y qué tratamientos pueden utilizarse para solucionar este problema.
Índice
¿Por qué un déficit de hierro provoca la caída del pelo?
El hierro cobra un papel fundamental en la actividad habitual del folículo piloso. Este mineral participa en su metabolismo energético y en la oxigenación y crecimiento del cabello y por eso, cuando una persona tiene un déficit de hierro o ferropenia el ciclo del cabello se ve alterado y/o también se pierde densidad, fuerza y volumen.
Al ser un mineral tan importante para la salud capilar, la caída del pelo es una de las primeras alarmas ante un déficit de hierro. Este fenómeno puede darse antes incluso de que se llegue a desarrollar una anemia como tal.
¿Cómo reconocer la caída de pelo por falta de hierro?
En sus primeras etapas, la caída de pelo por falta de hierro suele empezar como una caída de pelo difusa. Lo habitual es notar una pérdida progresiva de densidad capilar rápida y bastante llamativa. Aunque también, puede producirse directamente un efluvio telógeno; una gran cantidad de pelo se cae de forma rápida y repentina.
El efluvio telógeno es una respuesta muy habitual ante la falta de hierro porque lo que sucede es que el déficit de este mineral altera el ciclo natural del cabello. Al no contar con los recursos necesarios, más folículos de los normal entran en fase de reposo antes de tiempo; haciendo que el pelo se caiga.
Lo más llamativo -y quizá confuso para la persona que lo sufre- es que este tipo de pérdida capilar no se produce en el momento. Este tipo de alopecia aparece entre dos y cuatro meses después de que se dé el factor desencadenante.
Además del efluvio telógeno, la caída de pelo por falta de hierro puede desencadenar o agravar otros problemas de salud capilar. Por un lado, el efluvio telógeno puede convertirse en un efluvio telógeno crónico si la caída de pelo se prolonga más allá de los seis meses. Por el otro lado, un déficit de hierro puede agravar o acelerar una alopecia androgenética o areata.
¿Cómo puede solucionarse la alopecia por falta de hierro?
Es importante tener en cuenta que lo más habitual, especialmente si se actúa con rapidez, es que este tipo de pérdida capilar no sea definitiva. Generalmente se trata de una situación que se soluciona por sí misma cuando se corrige el déficit de hierro.
No obstante, para solucionar este problema puede recurrirse a una o varias de estas medidas:
- Suplementación: Una de las pautas de atención más comunes para solucionar el déficit de este mineral es recurrir a la suplementación, ya sea de forma puntual para corregir el problema o como un tratamiento en caso de que el paciente tenga problemas para su absorción de forma natural. En ocasiones, los suplementos de hierro pueden complementarse con dosis ricas en otros minerales y vitaminas como la L-Cistina o la Biotina.
- Alimentación: Llevar un dieta rica en alimentos con hierro es fundamental para la recuperación. Estos, además, pueden combinarse con otros que sean ricos en vitamina C para favorecer la absorción.
- Bioestimulación capilar: Los tratamientos de bioestimulación capilar son un apoyo extra que puede ayudar a tu cabello a recuperarse de la caída de pelo por falta de hierro. Sirven para aportarle a tu cabello el extra de nutrientes que necesita y pueden cumplir una función vasodilatadora para reactivar la circulación sanguínea.
Un diagnóstico certero es el mejor aliado para saber qué hacer ante los primeros síntomas de la alopecia. Nuestra recomendación es que, si crees estar experimentando una pérdida de pelo por falta de hierro, consultes a un especialista en salud capilar como los que trabajan en la clínica Inpylus cuanto antes. ¿Sabías que nuestra primera cita es 100% gratuita? Reserva ya y ven a conocernos. ¡Te esperamos!