Ante un trasplante de cabello, algunas personas pueden experimentar tripofobia al ver el cuero cabelludo inmediatamente después del procedimiento, ya que la técnica de extracción y la inserción de los folículos capilares puede crear una apariencia de pequeñas perforaciones en la piel.
En este artículo vamos a ver qué es la tripofobia, por qué puede desencadenarse esta fobia tras el injerto capilar y cómo llevar esta situación lo mejor posible.
¿Qué es la tripofobia?
La tripofobia es el miedo o la reacción emocional adversa cuando se ven patrones de pequeños agujeros o protuberancias. No todas las personas experimentan incomodidad ante estos estímulos visuales. A quienes les produce tripofobia este tipo de signos suelen tener sensaciones de ansiedad, asco o incluso ataques de pánico.
Esta reacción se puede provocar al ver imágenes u objetos de todo tipo, desde un panal de abejas hasta esponjas o frutas con muchas semillas, así como ciertas características de la piel.
No hay una explicación clara sobre el origen de la tripofobia, aunque algunos estudios sugieren que puede estar relacionada con una respuesta evolutiva en el ser humano, que nos hacía tener rechazo hacia ciertos peligros en el entorno, como plantas venenosas o animales peligrosos en el pasado.
¿Qué relación hay entre la tripofobia y el trasplante capilar?
Antes de abordar la relación entre ambos aspectos, es útil que entendamos cómo se realiza un injerto de pelo. Uno de los métodos más actuales y frecuentes es la técnica FUE, que realizamos en Inpylus. En este procedimiento se extraen folículos pilosos individuales de una zona donante (que generalmente es la parte posterior del cuero cabelludo) y se implantan en las áreas en las que se ha sufrido pérdida de cabello.
Por tanto, con la técnica FUE se realizan pequeñas incisiones en la zona donante y receptora, que pueden verse como diminutos agujeros en la piel durante la fase postoperatoria temprana. Son estos pequeños agujeros los que resultan incómodos para las personas que sufren tripofobia.
Tras el implante de cabello el cuero cabelludo presenta un aspecto que recuerda a patrones repetitivos de estos pequeños agujeros, ya que cada folículo trasplantado deja una marca temporal. Son los puntos visibles de la piel los que desencadenan síntomas de tripofobia en algunas personas.
En las semanas posteriores a la intervención, es frecuente que se formen costras alrededor de las incisiones, lo que puede intensificar la apariencia de patrones repetitivos, y por tanto generar esa reacción tripofobia. Es por tanto la fase inicial del proceso, en los primeros días y semanas tras el trasplante, cuando los pacientes con tendencia a la tripofobia se pueden sentir más incómodos.
¿Cómo podemos llevar mejor la situación?
La tripofobia relacionada con el injerto capilar tiene su origen en una respuesta psicológica y visual, en la que el simple acto de observar patrones repetitivos en el cuero cabelludo puede causar rechazo o malestar. Se trata de una reacción puramente psicológica, pero que puede ser intensa en algunas personas.
Si sabes que tienes tripofobia o experimentas un alto malestar al observar ciertas imágenes, es importante que te prepares mentalmente antes de someterte a un trasplante capilar, especialmente para el aspecto que tendrá tu cuero cabelludo en las primeras semanas del proceso. Nuestras recomendaciones son las siguientes:
- Comunícalo al cirujano. Antes de hacer el injerto, es importante que le cuentes a tu cirujano y al equipo médico tus preocupaciones sobre la tripofobia. El equipo profesional podrá explicarte con detalle el aspecto de tu cuero cabelludo y lo normal de la situación, así como darte consejos para afrontar la situación. Las clínicas como Inpylus estamos familiarizadas con este tipo de inquietudes, e incluso podemos ofrecer sedación para sobrellevar mejor la intervención.
- Preparación psicológica. Es bueno que te prepares emocionalmente para enfrentar esa situación que te incomoda, con técnicas de relajación o desensibilización progresiva ante imágenes que desencadenan tu tripofobia.
- Cubre el cuero cabelludo. Puedes utilizar una gorra, pañuelo o sombrero ligero para evitar ver los signos que te causan malestar en tu cuero cabelludo. No obstante, es importante que lo consultes con el cirujano, ya que en los primeros días no se recomienda tapar la zona.
¿Cuánto tiempo duran los signos del trasplante?
Lo bueno de esta sensación de malestar es que las pequeñas perforaciones visibles serán temporales. En la mayor parte de los casos, las costras desaparecen en una o dos semanas, y el cuero cabelludo empieza a tener una apariencia más uniforme.
En aproximadamente 3 o 4 semanas, la mayoría de los pacientes no tienen signos visibles de la intervención.
Con el paso del tiempo, el cabello comenzará a crecer de manera normal en las áreas trasplantadas, por lo que dejarás de ver cualquier patrón o apariencia que pueda desencadenar la tripofobia. En este artículo de Inpylus puedes ver cuánto tiempo se tarda en ver los resultados de un injerto capilar.
Ante cualquier malestar que tengas, es importante que hables con tu cirujano y con el equipo médico para que puedan facilitar el proceso y te sientas lo más cómodo y cómoda posible en todas las etapas.
En nuestra clínica capilar Inpylus nos enorgullecemos de hacer que cada paciente tenga seguridad y tranquilidad en cada paso hacia la recuperación capilar, por lo que no dudes en contactar con nuestro equipo para concertar una primera cita gratuita y valorar tu caso personal. Te apoyaremos en todo lo que necesites.